Es cosa de hombres!!! sigue participando de mi interés temático en el dolor, en los procesos de superación e integración del dolor en la vida de las personas.
En este caso focalizo aún más y aporto en esta acción contenido de género.
Los roles culturales que la maquinaria social transmite asimilados a género no contemplan la posibilidad de un hombre exprese emocionalmente sus sentimientos. En definitiva amputan el mecanismo psicológico y quasi biológico de las etapas de duelo. Tendemos a asociar, porque la cultura así lo dicta y permite, capacidades como la empatía, la expresión de los sentimientos y el llanto con mujer. Así el hombre que osa usar esas capacidades que como humanos tenemos corre el serio peligro de no ser hombre o de no serlo suficientemente o de ser marica. Los hombres no lloran, los hombres son valientes, los hombres tienen cojones, ...
En "Es cosa de hombres!!!" me apropio de esta frase publicitaria y en absoluto inocente que a muchos hombres nos pesa como una losa asociada a una marca de coñac que conlleva todo un código normativo y de actitud transmitido culturalmente.
Trato, con lenguaje poético, dos opciones de vivencia del dolor. La autoflagelación y la no expresión verbal del dolor: beber para olvidar. Y el desafío que como hombres podemos hacer a la cultura amputante usando las capacidades biologicas con las que hemos nacido. Introspeccionarnos, contar qué nos pasa, llorar por lo que nos duele y completar el ciclo del duelo para integrar la pérdida y proseguir nuestra búsqueda de la felicidad. Expresarnos emocionalmente no sólo nos completa como los seres humanos que somos sino que también es motor de cuestionamiento y cambio social.
Documentación fotográfica de Celia Escudero-Espadas de la sesión de grabación de la video-performance.
Musica original de: Xavier Torns.
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